La sensación que provoca ese juego de limitaciones que impone el muro y que en un juego de grande ingenio plástico va generando aperturas visuales hacia el mar en un alarde de perspectiva.
Ese laberinto de límite y apertura que generaron sabiamente las arquitecturas que conforman el lugar histórico, en una distribución en niveles o intervalos de proporciones que produce un singular perfeccionamiento en la composición urbana, por el modo en que se relacionan las diferentes edificaciones.
El proyecto se concibió pues, desde ese mirar alrededor y ver ese conjunto granítico, y repetir… Repetir entonces desde el valor del espacio libre intermedio, desde el espacio público para la convivencia siempre con gran valor estético. Ordenando y cohesionando un grupo de edificaciones que albergaran usos diferentes, inventar en fin, un espacio habitable desde las geometrías.
El proyecto resalta lo como esas geometrías va generando el espacio, el vacío. Un vacío entre realidades plásticas.Espacios geométricos, secuencias de planos puros.
Arquitectura de soluciones, respuesta a la naturaleza gravitatoria del granito.Volúmenes simples, adoptados como prismas elementales, capaces de conjugar las formas para provocar un recinto convicto que se va perforando en pequeñas plazas, edificaciones que cierran y abren el espacio constituyendo así una composición interna cóncava. Repetir también el empleo del granito como material, como respuesta racional, haciendo que se exprese en el proyecto de un modo evidente, simplemente declarando su naturaleza.